El 8 de mayo de 2025, la Iglesia Católica había elegido al nuevo Papa León XIV, y la noticia resonó con fuerza en Chicago, pues el nuevo pontífice, antes de su histórica ascensión, era conocido como Robert Francis Prevost, un cardenal de 69 años.
Mientras la mayoría de la gente se sumergía en los orígenes y la vasta experiencia del nuevo Santo Padre, en Runner’s World Magazine se han planteado una pregunta singular: ¿es el Papa León XIV un corredor?
Robert Prevost, el maratonista
La pregunta si el papa el un corredor podria no parecer rara, ya que el Pontífice siempre ha sido un deportista y un apasionado del deporte. Pero la respuesta es no, el nuevo Papa no tiene récords de maratones ni de ninguna otra carrera a su nombre. Sin embargo, esta investigación llevó la revista deportiva a descubrir a otro Robert Prevost, un hombre cuya vida dio un giro inesperado ese mismo día, todo gracias a su nombre.
Este Robert Prevost, de 48 años, consultor de relaciones públicas en Minneapolis y padre de gemelos adolescentes, es un apasionado corredor con miles de millas recorridas a sus espaldas. Un hombre normal que ha completado incontables carreras, desde 5K hasta maratones por debajo de las cuatro horas. De repente, su nombre se convirtió en sinónimo de una de las figuras más famosas del planeta. La semana del 8 de mayo de 2025 se volvió la más extraña de su vida.
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Mientras el Papa León XIV iniciaba su pontificado, los periodistas de Runners World conversaron con el Robert Prevost, que compartió su experiencia surrealista: “Fueron muy divertidos. Ahora mismo estoy en Las Vegas con mi hermano menor para nuestro cumpleaños. Hace unos días estábamos sentados almorzando y vimos el nombre del nuevo Papa… lo soltó y empezó a reír diciendo: “¡Mi hermano es el Papa!”. De repente mi teléfono empezó a sonar, sonar y sonar otra vez, probablemente cientos de mensajes. Fue muy divertido, honestamente.”
La conexión no terminó ahí. Prevost ya sabía que existía un cardenal con su nombre, gracias a las alertas que recibe como consultor de relaciones públicas. Pero la coincidencia se volvió aún más asombrosa: “¡Lo más gracioso es que mi perro se llama Leo! Así que ahora, Robert Prevost no sólo es el Papa, sino que también es el Papa León. Cualquiera que conozca a mi familia sabe que Leo es una gran parte de mi vida y eso la hace aún más increíble.”
Prevost, quien comenzó a correr después de la universidad para ponerse en forma, ha completado tres maratones y ahora se dedica a los triatlones junto a su esposa Jill. Su distancia favorita oscila entre los 5 y 10 kilómetros. Si el otro Robert Prevost, el Papa, decidiera iniciarse en el running, el consejo de Prevost sería crucial: “¡Para estirar! Al principio pensé que simplemente saldría a correr, pero ahora que soy mayor me he dado cuenta de que estirarse es lo más importante que puedes hacer.” La lección más importante que el maratonista ha aprendido y que podría ser útil para Su Santidad, es “que hay poder en establecer una meta. Para mí, escribir un objetivo y luego tener algo por lo que trabajar y algo que esperar, creo que es la parte más divertida de correr.”
